El mundo está en
choque: Pandilleros narcotraficantes aliados con el matrimonio de prefecto y
esposa, candidata sucesora municipal en Iguala, fue encargado de la tarea de controlar
43 jóvenes de la Escuela Normal
Rural “Raúl Isidro Burgos” de Ayotzinapa.
Me gusta la
reflexión concreta para construcción crítica. En el ataque al símbolo mundial
del Rockefeller World Trade Center nos dimos cuenta que el “imperio” sustituía
al “imperialismo”. Cupo al ladino Caesar
Bush Jr. el encargo de anunciar “Urbi et Orbi” no el nuevo status, pero en
estrategia de propaganda inversa, el denunció la acción como “ato de terrorismo”.
“Vivos se los
llevaron, vivos los queremos”. Encontré
esa frase en una piedra monumento en el Sarre en una pequeña aldea. Los
soldados alemanes aprisionados en la
Guerra contra Francia por la Alsacia-Lorena, en
1870, fueron prometidos que volverían, fueron hacinados por los franceses, que
después perdieron la guerra. En aquella
época aún la guerra era un juego de los nobles para demostrar poder sobre la
vida de sus súbditos y en la filosofía y iglesia, perdonen el pleonasmo, existía
hasta mismo la justificativa de violencia macabra: “La Guerra Justa …”
Ayer en la televisión
asistí a la película de Sergei Eisenstein, Iván IV, el Terrible donde hay un
pasaje con la justificativa de Czar para la invasión del Kazan: “No hay imperio
sin terror”.
No solo en México
los políticos se creen reyes, casi dioses mitológicos. Pero así como los reyes, no tenían
sustentabilidad económica por lo que necesitaban donaciones y préstamos de
banqueros como Rothschield y otros para mantener sus juegos de guerra y poder.
Las grandes
corporaciones hacen eso pero con escala, donde un cacique municipal no consigue
recibir más que cien mil dólares/año, ya que el gobernador tiene el poder de
ordenar la acción, pero a un costo de mayor envergadura.
En la actualidad
latino-americana hay un “sponsor” con mucho más poder que los banqueros del
Siglo XVIII y XIX o las corporaciones: Los Carteles del Tráfico.
Los servicios
prestados por los políticos a los carteles tienen remuneración generosa,
estimulante, lo que permite el “juego de la guerra” por territorio, mercado o
ascensión y “poder” de marionetas.
Lo idiota es que
no es estudie la “libre iniciativa imperial británica” de comercio de su opio
indiano para el consumo chino, la resistencia de esos y la Guerra Justa de los Boxers o
Guerra de las Artes Marciales. Es
diferente de lo que se hace en la actualidad, donde el drenaje de dólares en la
economía es combatida, pero la inversiones financieras nacionales del
narcotráfico son muy bien recibidas…
¿Quién llevó el
cultivo de amapola para las altas montañas del Estado de Guerrero en la Segunda Guerra Mundial, donde
actúa los “Guerreros Unidos”? ¿No lo
saben Ustedes?
La enlutada
Escuela Normal Rural de Ayotzinapa perdió 43 alumnos y hay conmoción mundial,
pero nadie explicita la creciente promiscuidad entre narcotraficantes y
políticos locales, regionales, nacionales y mundiales pues eso es parte de la
guerra justa del imperio que lucra y mucho con ella.
La consigna (foto)
no tiene más cabida, pues “Vivos ellos no volverán”. Pero es imprescindible
impedir la continuidad y escalada de esa guerra.
La masacre muestra
que las disputas ultrapasaron los combates entre “soldados” y mundo del narcotráfico, ahora todos están
involucrados. Para tal, en la televisión
brasileña hay una “educativa” novela sobre “senador” Pablo Escobar, que poseía
hipopótamos para ejecutar sus desafectos...
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